Sin duda alguna, esta asignatura ha sido una de las que más he disfrutado a lo largo del grado multimedia.
La fabricación digital, bien sea en un entorno de FabLab o individualmente en tu casa gracias a lo económico que resulta hoy día hacerse con un equipo bien de corte laser, impresión 3d u otros, ha democratizado la capacidad de creación y materialización de prototipos en todo tipo de ambientes.
Hace unos años, era impensable pensar que en tan solo unos minutos podías tener un archivo tridimensional generado por ordenador materializado en un plástico asequible y versátil o poder vinilar superficies con tus diseños o cortar paneles de madera con un diseño profesional.
La proliferación de las herramientas de fabricación digital, los espacios de creación o comunidades virtuales para intercambio de ficheros han supuesto un cambio muy importante en el modelo productivo colaborativo mundial, donde cualquier persona con unos recursos mínimos puede convertirse en un creador o “maker”
La experiencia de colaborar con un instituto, donde unos estudiantes han sido capaces de materializar estos archivos que conforman los juegos diseñados por los estudiantes de la UOC, pone de manifiesto lo necesario de los espacios de colaboración y fabricación colectiva, donde cualquier idea cuenta y los diseños de unos, pueden utilizarlos otros.
Personalmente, la gestión de este proyecto con un equipo de trabajo proveniente de distintas ramas me ha dado la oportunidad de centrarme en las ideas que aportan mis compañeros y aprovechar su experiencia, que aunque en algunos casos puede no ser tan técnicamente completa como la de otros compañeros, sirve como catalizador de ideas y aporta puntos de vista y perspectivas diferentes para plasmar el proyecto.
En la fase de ejecución del proyecto, cabe destacar que resulta algo complicado en ocasiones gestionar las reuniones entre el personal del grupo, del mismo modo, el hecho de que las distintas fases tengan que evolucionar en función al feedback recibido por parte de la escuela, hace muy complicado poder llevar un ritmo constante y gestionable.
Por otro lado, tener la responsabilidad de generar un entregable con el que un usuario tiene que estar conforme, es una fórmula que te ayuda a adelantarte a posibles problemas y a realizar de antemano un análisis más pormenorizado con el fin de evitar un feedback negativo, del mismo modo, este es el modelo con el que tendremos que trabajar en nuestro día a día, con lo que resulta un proyecto muy real y útil.
En resumen, la experiencia me ha resultado tremendamente enriquecedora y positiva, aunque no he podido disfrutarla al máximo por falta de tiempo. Cabe destacar que uno de los comentarios que más han repetido los compañeros es que el proyecto coincide con el final del semestre donde tenemos un montón de entregas de otras asignaturas y ya se llega un poco desgastado a estas fechas, pero aún así, el balance es totalmente positivo y solo queda dar las gracias a todos los implicados en este proyecto colaborativo y que espero que siga adelante y que cada año se implementen nuevos proyectos.
Saludos.